Existen muchas leyendas urbanas al respecto de que Google espía a sus usuarios.
¿Le suena familiar la siguiente situación?: Se encuentra usted hablando con alguna persona sobre cualquier tema; tienen los teléfonos en la mesa o a un costado, de pronto terminan de hablar, alguno desbloquea su teléfono e ingresa a Google Chrome; entonces «mágicamente» aparece publicidad relacionada al tema que hablaba con su interlocutor, sea que haya tratado de comida, viajes, tecnología o lo que fuese.
Situaciones como esta han llevado a pensar a las personas que su teléfono «las espía». Hasta hace un tiempo, los expertos atribuían este tipo de comportamiento al Machine Learning, que es tecnología de aprendizaje, es decir se aprende de las experiencias y preferencias del usuario, y conforme a eso Google o Facebook van enviando publicidad que creen le puede interesar a la persona, derivado de sus búsquedas, estados y preferencias de configuración.
Sin embargo, recientemente Google aceptó ante el Comité Permanente de Tecnología del Parlamento en la India, que sus empleados escuchan algunas grabaciones de conversaciones entre los usuarios y el Asistente de Google. Google había explicado a principios de 2019 que sus empleados escuchaban ocasionalmente las grabaciones de conversaciones realizadas por los usuarios con su asistente virtual. En una publicación, Google dijo que para casi el 0.2% de las grabaciones de audio realizadas, la compañía permitió la revisión humana de las grabaciones.
¿CUAL FUE LA JUSTIFICACION?
En su declaración ante el Panel del Parlamento, el equipo de Google dijo que en la grabación de audio no se escuchó la información sensible. La compañía dijo que solo se grabaron y escucharon conversaciones generales, aunque no brindó ninguna aclaración sobre cómo diferenciaba entre información sensible y no sensible. Un miembro del panel dijo: «La admisión de Google explica por qué miles de usuarios justo después de preguntarle al asistente de Google sobre hoteles en una ciudad comienzan a recibir mensajes en sus cuentas en diferentes plataformas sobre ofertas y promociones».
En sus términos y condiciones, Google establece claramente que las grabaciones de audio entre los usuarios y sus altavoces inteligentes de Google y los dispositivos del Asistente de Google se graban y almacenan. Pero los términos no mencionan que sus empleados pueden escuchar extractos de estas grabaciones. También, cabe la posibilidad de que estas escuchas se realicen incluso si es que el asistente de Google no haya sido activado.
Todo esto nos lleva a preguntarnos que tanto sabe Google de nosotros, y más aún, a que datos tiene acceso su personal. Recordemos el caso de Cambridge Analytica; una empresa que manipuló a millones de votantes a favor de Donald Trump, con base a los datos que tenía guardados de los ciudadanos. ¿Google espía a sus usuarios? No lo sabemos a ciencia cierta, pero la probabilidad dados los hechos, se inclinan más por el sí.